miércoles, 22 de julio de 2009

Adiós...

Arrastrado… veo la luz enrarecida por el agua sobre mi cabeza
Flotando entre corrientes adversas, ascendentes, descendientes
Oscilantes, cambiantes... sin dar paso a la razón
Irregulares… el caos se apodera de mi mente…
Los recuerdos fluyen en un torbellino indescriptible
Las sombras transitan, olores, sabores, la sal de tu piel
El dulce olor de tu ser
La alegría, lo hermoso, las mentiras, el amor, el desamor
Todo fluye en la corriente que me arrastra
Los sonidos se mezclan, el oxigeno me falta
El transito desbordado, el aire viciado de la ciudad
Las luces vespertinas, el olor a mugre
La verdad… tan difícil y áspera de tragar
Que te rodea, te ata… hace todo amargo con sus dosis de realidad
Te vuelve amargo y áspero… es difícil de manejar
Pero solo basta algo… pequeño y minúsculo que calme la corriente
La paz… fluye… dejando que todo simplemente sea…
El saber que ame sólo, que no importa el qué y el porque
Que el mundo no se detiene aunque estes en el piso
Y que decidas o no, ponerte de pie, la vida continua
Nunca perder la capacidad amar o ser amado
He ahí el secreto… ame y ahora me toca dejarte ir…
Adios…

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